 |
|
|
|
YASMIN MONSALVE EL UNIVERSAL Yucef Merhi, artista venezolano residenciado en Nueva York, convencido que 'cualquier artista tiene que salir de su contexto y absorber lo que está más allá de las fronteras', siguió los pasos de grandes creadores venezolanos que salieron de Venezuela, además de establecer una carrera productiva, se consolidaron como referencias del arte moderno y contemporáneo, como Alejandro Otero, Jesús Soto, Carlos Cruz-Diez y otros más jóvenes como Meyer Vaisman, José Antonio Hernández-Diez, Javier Téllez o Arturo Herrera. Merhi reconoce que 'después de vivir un tiempo en un sitio como Manhattan se pierde el sentido de nacionalidad y te conviertes en un híbrido cultural. Esto inevitablemente influyó en mi proceso de investigación y de creación. La utilización de otros idiomas, de íconos culturales, de tecnologías de vanguardia, son reflejos de esta circunstancia'. Big Sur, la más reciente exposición de Yucef Merhi en la galería The Proyect de Los Angeles, funge como una respuesta al desesperante escenario venezolano. 'El trabajo, que podrá verse hasta el 15 de febrero, es una instalación titulada Máxima Seguridad y es un proyecto que inició en 1998, año en el que comencé a interceptar los correos electrónicos (e-mails) enviados directamente a la cuenta personal de Hugo Chávez Frías. Desde esa fecha, en la que Chávez era candidato a la Presidencia, hasta la actualidad, he recibido miles de correspondencias que utilicé para tapizar los 1.000 m. de la galería, incluyendo la oficina y el baño', explica Merhi en un email. Este trabajo se gesta en 1999 cuando presentó en el Laboratorio de Arte Contemporáneo de Caracas, bajo la curaduría de Miguel Miguel, un folio de 90 x 70 cm. donde destacaban algunos de los primeros correos enviados al presidente venezolano. Merhi comenta que entre los mensajes destacan cartas enviadas por amigos y familiares de Hugo Chávez y Marisabel; funcionarios políticos y militares, tanto de Venezuela como de otros países; así como venezolanos de todos los estratos sociales, muchos de los cuales se ofrecieron en los inicios del presente gobierno a ayudar y colaborar en cualquier actividad donde pudiesen aplicar sus habilidades y conocimiento. Destaca el joven creador que 'casi todos los venezolanos radicados en el exterior que le escribían a Chávez manifestaban sus deseos de volver en tanto que las condiciones de vida mejorarían. Durante el primer año de gestión hubo mucha esperanza y apoyo al Gobierno; no obstante, hoy día casi todas las misivas que recibe Chávez son de reclamo donde solicitan la renuncia del gobernante'. Máxima Seguridad muestra la historia de Venezuela en los últimos 4 años, legitimando el correo electrónico como una fuente de información veraz desprovista de censura. En este sentido, explica Merhi que 'la composición del contenido remite a la estética de los concretistas, de modo que pudiese ser asimilado como un enorme poema visual. El trabajo, visto desde lejos, transfigura el lenguaje en una sucesión de símbolos indescifrables donde el valor semántico trasciende para convertirse un objeto visual. Ahora bien, a pesar de que en este trabajo no me comprometo políticamente a favor o en contra de Chávez, ya que simplemente funjo como intermediario entre quienes escriben los mensajes y los espectadores que asisten a la galería para leer estos mensajes, expongo la fragilidad del Estado y las instituciones venezolanas al demostrar lo débiles que son en materia de seguridad electrónica. Por otro lado, al ordenar los textos caóticamente, propongo una lectura de la obra como metáfora del desorden y desconcierto que se vive en Venezuela desde que Chávez asumió la candidatura a la presidencia'. En Máxima Seguridad Yucef Merhi expone nuevamente su interés por el hacking como instrumento de creación artística, afirmando la importancia de las nuevas tecnologías en el proceder del artista contemporáneo. |
Copyright 2002, Reservados todos los derechos.
